09/07/2025
Facundo Aguilar Fajardo fue excarcelado tras un fallo del juez Rubén Occhipinti, quien entendió que no tuvo intención de matar al niño de 7 años durante un tiroteo en Ciudad Evita.
El juez de Garantías de La Matanza cambió la calificación del hecho a homicidio culposo.
El disparo que mató a Thiago Correa ocurrió durante un intento de robo al policía.
Facundo Aguilar Fajardo disparó 11 veces para repeler el asalto; una bala alcanzó al niño.
Fue excarcelado, aunque se le impusieron varias restricciones, como no portar armas ni acercarse a las víctimas.
Podría recibir una pena de entre 6 meses y 5 años de prisión.
Facundo Aguilar Fajardo fue excarcelado por decisión del juez Rubén Occhipinti, que descartó el dolo y cambió la imputación. La muerte del niño ocurrió durante un tiroteo en un intento de robo.
La Justicia de La Matanza ordenó la liberación del policía Facundo Aguilar Fajardo, de 21 años, acusado por la muerte de Thiago Correa, un niño de 7 años que fue alcanzado por una bala en la cabeza durante un tiroteo ocurrido en la noche del 4 de junio en Ciudad Evita.
La decisión fue tomada por el juez de Garantías Nº3 de ese distrito, Rubén Occhipinti, quien determinó que se trató de un homicidio culposo y no de un homicidio simple con dolo eventual, como había solicitado el fiscal de homicidios, Diego Rulli.
En su resolución, Occhipinti sostuvo que no hubo intención de matar o herir a alguien ajeno al enfrentamiento. Señaló que la visibilidad era escasa, que el hecho ocurrió de noche y que había varios obstáculos (autos, árboles, toldos y postes de luz) entre el lugar donde estaba el policía y donde se encontraba Thiago.
A raíz de esto, rechazó el pedido de prisión preventiva y ordenó su excarcelación con restricciones.
El policía quedó en libertad, pero bajo estrictas condiciones judiciales:
Prohibición de portar o usar armas de fuego.
Fijación de domicilio y notificación ante cualquier ausencia mayor a 24 horas.
Presentación ante el juzgado dos veces al mes.
Prohibición de acercarse a menos de 300 metros a las víctimas y sus familias.
Prohibición de contacto por cualquier medio con los heridos o familiares de Thiago.
La noche del 4 de junio, pasadas las 22, Thiago Correa y su papá, Fabián, esperaban el colectivo en avenida Crovara y Madrid (Ciudad Evita), cuando Aguilar Fajardo fue interceptado por cuatro delincuentes armados mientras caminaba junto a su madre.
El policía, vestido de civil, extrajo su arma reglamentaria y disparó once veces. Uno de los proyectiles impactó en la cabeza del niño, que falleció dos días después en el hospital Balestrini.
Durante el tiroteo, uno de los asaltantes, Brandon Corpus Antelo (17), murió tras recibir dos disparos en el pecho y uno en la mano. Otros dos ladrones resultaron heridos y un cuarto fue detenido días después.
Con la nueva calificación legal -homicidio culposo, agravado por uso de arma y con exceso en la legítima defensa, en concurso ideal con lesiones graves-, el policía podría recibir una pena de entre 6 meses y 5 años de prisión.
El caso sigue en investigación, pero la decisión judicial abre el debate sobre el uso de la fuerza en situaciones de inseguridad y sus consecuencias para terceros.
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