18/10/2023
La pasión por los "fititos" lo llevó a transformar uno en lancha.
por
Julieta Aurilio
El amor por los autos puede llevar a las personas a
emprender proyectos tan sorprendentes como inusuales. En el caso de Oscar
Pesante, un vecino del Delta de Tigre, la pasión por los
"fititos" se convirtió en una aventura singular que ha llamado la
atención de personas de todo el mundo.
Desde su infancia, creció el amor el icónico Fiat 600.
"Nació la pasión por el Fitito cuando tenía 9 años y más por el Fiat
600 que era de un patrón donde yo trabajaba", le cuenta a El
Bonaerense.
A la temprana edad de 12 años, ya había aprendido a trabajar con este emblemático automóvil. Sin embargo, no fue hasta más tarde que pudo tener uno propio, aunque las circunstancias no le permitieron disfrutarlo plenamente: "Lo tuve que vender porque no podía manejarlo".
La historia da un giro inesperado cuando, tiempo después, Pesante
encuentra un Fiat 600 abandonado por un vecino. Sin dudarlo, decide adquirirlo
y llevarlo a su hogar en la isla. Su deseo de destacarlo lo llevó a convertirlo
en un vehículo flotante.
Durante la pandemia, mientras cumplía con la cuarentena en el Delta de Tigre, la idea tomó forma. "Se me ocurrió subirlo arriba de un casco de un bote y probar si flotaba, si era estable, si era viable, y así fue surgiendo", cuenta. Tras diversas pruebas y ajustes, logró hacer que el Fiat 600 flotara. "Le puse un motor para probar y navega muy bien, la verdad", detalla el vecino.
A pesar de su éxito, las autoridades locales le impiden
navegar con su particular creación. "Prefectura me notificó que no
puedo navegar y tengo que hacer todo un trámite engorroso, así que quedará
flotando sin navegar", lamenta Pesante. A pesar de las dificultades en
Argentina, otros países han abrazado la idea de automóviles-lancha. "En
otros países, hay autos convertidos en lanchas y todo es mucho más fácil que acá", agrega.
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La noticia sobre su proyecto se hizo viral, atrayendo la
atención de personas de todo el mundo. "Me llamaron de Alemania, de
todo el mundo. La gente pasa a verlo, me felicitan. Es algo original. El Fiat
600 es un clásico argentino". De hecho, Pesante fue invitado a
participar en un museo de Fiat 600 y en una fiesta organizada por el garage.
El proceso de creación y adaptación de su Fiat 600 flotante no fue sencillo, especialmente debido a las restricciones de la pandemia. "Traer los materiales aquí es más difícil. Tardas 2 horas con una lancha pasajera o 45 minutos con una rápida", explica. Sin embargo, su determinación lo llevó a completar el proyecto en aproximadamente un año y medio.
Ahora, Oscar Pesante sueña con patentar su invención y
convertirla en una atracción turística en el Delta de Tigre. "Me
gustaría poder usarlo, patentarlo y que sea mucho más fácil. Pido una excepción
extraordinaria para poderlo usar como atracción turística. Que la gente lo vea
y lo disfrute como la gente que lo ve por internet".
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