Familias dejaron de llevar a sus hijos por miedo ya que además de las agresiones físicas, los intimidan por redes sociales.

Se trata de la Escuela Técnica N° 5 de Libertad y la  Escuela Secundaria Nº 4, del partido de Merlo, donde un grupo de padres se manifestó en unión contra la violencia que padecen los alumnos de los lugares mencionados. “Los chicos llevan armas blancas, drogas y se atacan a la piñas”, dijo una mamá. 

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Al respecto, la “guerra” entre colegios viene de hace rato, pero eran discusiones y pequeñas diferencias hasta que en estos días se desencadenó en situaciones de extrema violencia. En primer lugar, debaten por mensajes donde amenazan con asistir al colegio de otro “con palos, navajas y armas”.

En esta línea, hasta hubo una discusión en la Técnica porque uno de los chicos había llevado un revólver calibre 9 milímetros. “Fue un desborde, hubo batallas campales en el patio y afuera de la escuela, y las autoridades no hicieron nada; no sé si es porque no querían o no podían hacer nada. Es una locura”, comentó la mamá de uno de los alumnos al medio ANDigital.

En ese sentido, familias manifiestan sentir temor ya que no saben si les pasará algo a sus hijos. Ante esto, no permiten que vayan al colegio pero los violentos continúan asistiendo sin ningún problema, a consecuencia, exigen que las autoridades del colegio se presenten y pongan reglas en el asunto. 

“Todo esto está sucediendo en la Escuela Técnica N° 5. Se agravan las peleas y ahora hay provocaciones y amenazas de muerte entre ellos. Hablan de ir armados con facas y otros se pasan fotos de armas de fuego. Hay mucha preocupación entre los padres de los alumnos. Esto puede ser una tragedia”, manifestó un padre en el grupo de Facebook Merlo Real.

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A su vez, madres de estudiantes contaron que «Las peleas son uno de los hechos que están pasando en el colegio,pero no el más grave. También hay ventas de drogas y abusos en los baños. Los padres tendrían que hablar con los chicos para que les cuenten lo que está sucediendo. Los directivos están ausentes».

En este contexto, patrulleros custodian el colegio, sin embargo, como suele suceder, es hasta “calmar las aguas” ya que la preocupación de los padres está presente, los chicos cada vez más agresivos y las amenazas de muerte continúan  vigentes.