Una fábrica de cerámicos cerró temporalmente en Olavarría y peligra medio centenar de puestos de trabajo

La caída de la demanda y del desarrollo de construcciones por los vaivenes de la economía impactó de lleno en una tradicional fábrica de cerámicos de Olavarría, que permanece cerrada desde las vísperas de Navidad y aún no abrió sus puertas.

La compañía Ladrillos Olavarría Sociedad Anónima, más conocida como LOSA, dejó de producir desde el 23 de diciembre del año pasado. En aquel entonces, se anunció que el cierre era por las vacaciones, pero desde entonces no volvió a prender los hornos.

Unos 55 trabajadores de la empresa quedaron en medio de un mar de incertidumbre, mientras el grupo empresario Holding Sociedad Comercial del Plata -dueño de la firma- define qué hacer.

Según trascendió, algunos de los operarios ceramistas pasarían a trabajar en la fábrica Cerro Negro, del mismo grupo comercial; por su parte, otros serían despedidos.

Sin embargo, esta medida desencadenaría el despido de alrededor de 60 obreros que cumplen tareas rotativas en esta segunda empresa y que fueron contratados en el último tiempo.

Por lo pronto, el secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados Ceramistas de Olavarría (SOECO), Gustavo Bustamante, aseguró que los contratos temporales no serían renovados.

"La empresa no iba a volver a producir por la gran caída de la demanda y que de esos 55 trabajadores solamente 35 se iban a incorporar a Cerro Negro y los otros 20 serían desvinculados, más 60 compañeros que estaban en Cerro Negro haciendo relevos de vacaciones y por ausentismo", alertó el sindicalista.

Según trascendió, los dueños de la empresa LOSA no tienen estipulado cerrar definitivamente las puertas de la fábrica. No obstante, la caída en las ventas no ayuda y, por el momento, los hornos de cerámica permanecerán apagados.