Rechazo unánime de los clubes de fútbol a las SAD

Luego de que varios clubes se pronunciaran en contra de las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) en la previa del balotaje presidencial que finalmente consagró a Javier Milei como el próximo presidente, el fútbol argentino dio un nuevo paso este jueves y rechazó la implementación de ese programa.

En medio de horas turbulentas por la posible salida de Lionel Scaloni de la dirección técnica de la Selección, los máximos dirigentes de los clubes de fútbol se reunieron este jueves en asamblea ordinaria para debatir respecto de lo que se considera la "privatización" de las instituciones que compiten de manera profesional en el ámbito nacional.

La votación se llevó a cabo esta tarde en el gimnasio de futsal del predio que la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) "Lionel Messi" de Ezeiza y el resultado fue contundente: 0 votos a favor y 45 en contra.

De esta forma, se ratificó el rechazo a las Sociedades Anónimas Deportivas y el mantenimiento de la figura de Asociaciones Civiles Deportivas sin Fines de Lucro para los clubes argentinos.

"Cada uno de ustedes hizo una manifestación pública contra las SAD y quiero felicitarlos. Los clubes necesitan cumplir la función que cumplen como las Asociaciones Civiles que son. Estoy convencido de que esa es su esencia", remarcó el presidente de la AFA, Claudio "Chiqui" Tapia.

Esta fue la tercera ocasión en la que el máximo ente del fútbol nacional rechazó un proyecto similar: "Es un tema terminado, no vamos a pelear contra algo que no existe. La posición institucional la marcaron los clubes públicamente", remarcó el titular de la entidad.

Previamente, en 1998 Mauricio Macri -entonces presidente de Boca- impulsó la iniciativa y apenas sacó dos votos: el suyo y el de quien era mandamás de la AFA, Julio Grondona, quien militó en su contra en las sombras, pero lo apoyó públicamente para guardar las apariencias. Una clásica jugada del dirigente oriundo de Sarandí.

A 25 años de aquella votación, la "privatización" de los clubes volvió a ser rechazada y su futuro no parecería muy promisorio.