Números que preocupan: las ventas de comercios minoristas bonaerenses cayeron un 20% en enero

El primer mes del 2024 no fue positivo para los comercios de la provincia de Buenos Aires, sino todo lo contrario. Al menos eso reflejó la Federación Económica de Buenos Aires (FEBA), que alertó que la merma fue del alrededor del 20%.

La entidad que nuclea a más de 250 cámaras empresariales bonaerenses sacó un comunicado en el que refleja la situación que vivieron los negocios durante las primeras semanas del año, donde una fecha como Reyes suele colaborar a levantar el consumo.

No obstante, se dio una tendencia a la baja que ya había sido evidenciada por la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME), que en los primeros días del mes confirmaba que las ventas minoristas habían caído un 13,7% anual en diciembre. De esa manera, 2023 cerró con una baja del 3,4% a nivel nacional.

"En la provincia de Buenos Aires el impacto de los últimos saltos inflacionarios se hicieron eco en el bolsillo de la gente. En consecuencia, se reflejan en las ventas de los comercios minoristas de calles y avenidas. Todos los rubros, en mayor o menor medida, están sufriendo la crisis económica", aseguró el presidente de FEBA, Camilo Alberto Kahale.

"Los últimos meses del año pasado fueron muy difíciles y desafiantes para las pymes en general. El sector del comercio pyme apostaba al mes de diciembre para compensar las pérdidas acumuladas durante 2023. Sin embargo, sucedió todo lo contrario: la baja en las ventas continuó y durante el período de fiestas, en el que tradicionalmente se gasta más, el consumo fue moderado", remarcó el directivo.

"Esta tendencia continuó durante el mes de enero. Ni la fecha de los Reyes Magos sirvió para compensar, ya que para esa fecha también se notó una importante baja en las ventas que se transcribió en una caída del 13,6% con relación al pasado año", remarcó.

Desde la entidad argumentan que la caída del consumo minorista responde a la devaluación de la moneda impulsada por el ministro de Economía, Luis "Toto" Caputo, y la posterior suba de precios derivada de la misma.

"Quienes se toman vacaciones están en modo turismo gasolero, y los que están trabajando son austeros, ya que consumen lo mínimo y necesario. Las cuentas no cierran, ni para las familias ni para muchos empresarios y comerciantes pyme", remarcó Kahale.

"Pedimos que se preserve la salud del sector pyme, que son las principales generadoras de empleo y cumplen un rol fundamental en la contención de los lazos sociales en contextos de dificultad. Estamos abiertos al diálogo para acompañar decisiones que estimulen la actividad de los sectores productivos y la generación de empleo, lo único que históricamente ha tenido resultado positivo para el fortalecimiento de la economía argentina", concluyó el directivo