Navidad sin Joaquín: el dolor de una madre tras el crimen que conmocionó a Lomas de Zamora

A pocos días de Navidad y a cuatro meses y medio del asesinato de su hijo, Natalia Ciak puso en palabras el dolor que atraviesa desde el crimen que conmocionó a Lomas de Zamora. Joaquín, su único hijo, fue asesinado el pasado 5 de agosto en la casa familiar por su propio padre, Alejandro Ruffo, en un ataque que la mujer define como "consciente y premeditado".

En un testimonio enviado a TN, Natalia describió el momento más duro del duelo, el que llega cuando el impacto inicial comienza a disiparse. "Es cuando salimos del shock y empezamos a volcarnos a la realidad", expresó. En ese proceso, sostuvo que el acusado sabía exactamente dónde golpear: "No es un padre, no es un ser humano. Sabía que haciéndole daño a Joaqui me daba en el talón de Aquiles".

Natalia contó que durante mucho tiempo creyó que ella era el blanco del ataque, pero que con el correr de los meses entendió otra dimensión del hecho. "La peor traición no fue hacia mí. Fue hacia Joaquín", afirmó, al referirse al crimen.

Natalia Ciak relató el dolor que atraviesa tras el asesinato de Joaquín a manos de su padre, ocurrido el 5 de agosto en Lomas de Zamora, y aseguró que salir del shock hace aún más cruda la realidad del hecho.

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El asesinato marcó un quiebre absoluto en su vida. Criada en una familia trabajadora y con padres presentes, aseguró que jamás imaginó atravesar una tragedia de esa magnitud. "Nunca pensé que podía perder a un hijo tan deseado", señaló. Sobre el acusado, evitó profundizar y fue contundente: "A esa persona la tengo bloqueada en mi mente. Yo solo voy a hablar de Joaqui".

En su testimonio, también hizo referencia al camino del duelo, al que definió como lento y doloroso. "No recuerdo quién era antes de Joaco. Es volver a armarme, reencontrarme", explicó. En medio del sufrimiento, remarcó una convicción que la sostiene: mantener viva la memoria de su hijo y evitar que el crimen quede en el silencio.