Laferrere: Un joven de 19 años recibió una violenta patada en la cabeza y terminó con muerte cerebral

Lautaro Diego Emanuel Alvaredo, de 19 años, fue atacado a golpes en la localidad bonaerense de Gregorio de Laferrere en el partido de La Matanza. El ataque le provocó "muerte cerebral". El hecho sucedió en la mañana del lunes a la salida del boliche "Cyrux".

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La secuencia de los hechos que pudo ser reconstruida indica que aproximadamente a las 7 de la mañana, el personal de seguridad del boliche los expulsó a él y a sus amigos después de un altercado con otro individuo. La disputa continuó en las afueras del local, donde ambos grupos se vieron envueltos en una pelea violenta. En medio de este enfrentamiento, Lautaro cayó al suelo, y según testigos, un joven le propinó una brutal patada en la cabeza, en un acto que recuerda al incidente que terminó en la muerte de Fernando Báez Sosa en enero de 2020 en Villa Gesell.

Fuentes policiales informaron al portal Inforbano que la investigación del caso está a cargo del fiscal de Homicidios de La Matanza, Fernando Garate. Se ha logrado identificar al presunto agresor, también de 19 años. Sin embargo, después de un allanamiento en la vivienda del sospechoso, no se pudo localizarlo, y actualmente se encuentra prófugo. Se cree que huyó de su residencia en compañía de su padre tras el ataque.

El padre de Lautaro, Diego Alvaredo, compartió su angustia en una entrevista con C5N, afirmando que la demora en la atención médica contribuyó a la tragedia. "Me lo mataron. Creo que era la tercera o la cuarta vez que Lautaro salía a bailar. Yo le pedí que, por favor, me avisara que estaba bien, esa era la condición para que no tuviera problemas, pero me lo mataron igual. La ambulancia no venía y un patrullero no lo quería llevar", relató.

La familia de Lautaro y la comunidad educativa del Instituto Puerto Argentino de González Catán, donde el joven cursó sus estudios secundarios, expresaron sus condolencias a través de las redes sociales. "Lautaro estará siempre en nuestros corazones, porque dejó una huella imborrable", declararon en un mensaje.

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La última comunicación que Diego Alvaredo tuvo con su hijo fue un mensaje de WhatsApp en el que Lautaro le informó que estaba bien antes del trágico episodio. El padre recomendó a su hijo que se mantuviera alejado de los problemas. Alvaredo concluyó: "El culpable es el que le pegó y el segundo culpable es toda la burocracia que hay para mandar una ambulancia de un lado al otro, no se quieren hacer cargo. Me dejaron a mi hijo muerto".