Caminó 2.200 kilómetros hasta el Vaticano: la historia de un vecino de Lomas de Zamora que cruzó Europa a pie

Rodrigo Grosso, de 33 años y oriundo del conurbano sur, del cuál partió a sus 19 años, emprendió una de las travesías más extensas e inusuales: recorrió 2.200 kilómetros atravesando Inglaterra, Francia e Italia, siguiendo una antigua ruta de peregrinación que culmina en Roma.

"Salí el 14 de junio desde Inglaterra y llegué el 29 de septiembre al Vaticano. Fueron 98 días caminando, con un promedio de 30 kilómetros por día", relató Rodrigo a El Bonaerense. "En la ruta había de todo: naturaleza, bosques, campos, pero también carreteras. Lo que más me encontré fueron campos de girasoles y trigo".

El viaje tuvo múltiples motivaciones. "Primero, porque es el año jubileo, que se celebra cada 25 años y donde se abre la Puerta Santa. Si entrás por ahí obtenés el perdón de tus pecados. Yo no soy religioso, pero me pareció un momento histórico importante", explicó. "También porque me gusta caminar, ya había hecho senderismo de larga distancia, y quería conocer otra parte de los países".

El viaje de Rodrigo tuvo múltiples motivaciones

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La experiencia, dice, lo marcó profundamente. "Fue linda a nivel personal, me marcó mucho, no solo físicamente sino mentalmente. Caminás la mayoría del tiempo solo, y es una manera de encontrarte a vos mismo".

Aunque su idea inicial era acampar todo el trayecto, el plan tuvo que adaptarse. "A medida que pasaban los días me di cuenta de que no era posible por una cuestión de higiene y de lugares donde no se podía acampar. Así que hice una mezcla: algunas noches en carpa y otras en albergues para peregrinos. Tenías que mostrar tu credencial y era más económico", contó.

Llegar a destino fue una emoción difícil de describir. "Fue difícil explicar lo que sentí cuando llegué al Vaticano. Soy agnóstico, pero después de 2.200 kilómetros es una sensación de haber cumplido algo. Ver en el mapa todo lo que caminé me parece una locura", expresó emocionado. "La gente que hizo la peregrinación a Luján me podría llegar a entender de alguna manera".

Aunque su idea inicial era acampar todo el trayecto, el plan tuvo que adaptarse.

Inició el camino solo, pero no estuvo completamente aislado. "En el medio se sumó mi novia unos días, después un amigo, y conocí peregrinos con los que caminé un tiempo. Lo hice solo, pero a momentos estuve acompañado", recordó.

Documentar la experiencia en redes también fue parte del desafío. "Fue lo más complicado, porque es un proyecto que arranqué hace poco. Tenía que grabar, editar y subir contenido todos los días", explicó.

Sobre sus viajes

No era su primera experiencia como caminante. Rodrigo ya había hecho el Camino de Santiago tres veces, el más largo desde Francia hasta Santiago de Compostela -unos 900 kilómetros-, pero esta travesía superó todo. "La del Vaticano fue la más larga que hice hasta ahora", aseguró.

Rodrigo ya había hecho el Camino de Santiago tres veces, el más largo desde Francia hasta Santiago de Compostela

Actualmente, Rodrigo vive en Letonia "por unos meses", desde donde sigue compartiendo sus viajes y experiencias. Pero ya planea su próxima aventura: "El año que viene quiero hacer la Vía Transilvánica, en Rumania, de norte a sur. Son 1.400 kilómetros, unos dos meses caminando. Esto recién empieza".