11/01/2025
BONA DATA
Fabricio Herrera, un niño de tan solo dos años, enfrenta una difícil batalla contra una enfermedad rara y severa conocida como Síndrome de Apnea Obstructiva del Sueño (SAOS). Esta condición provoca episodios repetidos de pausas en la respiración mientras duerme, lo que genera graves riesgos para su salud. El niño, que también padece aniquilosis en la articulación temporomandibular, requiere con urgencia aparatología especializada para poder respirar correctamente durante el sueño.
El Hospital de Pediatría Garrahan, en Buenos Aires, solicitó el 25 de noviembre del 2024 la entrega urgente de los equipos necesarios a OSPRERA, la Obra Social de los trabajadores rurales. Sin embargo, a más de 45 días de esa solicitud, la familia sigue sin recibir ninguna respuesta por parte de la obra social, lo que genera una creciente desesperación en los padres de Fabricio, quienes ven cómo el estado de salud de su hijo sigue siendo una incertidumbre sin solución.
El caso de Fabricio no es el único. Desde la intervención en la Obra Social, se han acumulado numerosas denuncias por la falta de servicios médicos esenciales, cortes en la entrega de medicamentos y problemas con la atención a pacientes con enfermedades graves, como los que requieren tratamientos oncológicos. Este desorden y desatención están agravando las condiciones de salud de muchos niños y adultos en las zonas rurales del país.
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