La Plata: un hombre fue atacado por una patota en su casilla y fue desalojado junto con su familia

Un hombre, su esposa y su hija fueron atacados brutalmente por una patota que irrumpió en su vivienda en La Plata. El hombre resultó herido y fue mordido por un perro pitbull traído por los agresores. Al final, los obligaron a abandonar la casa, la cual, según las víctimas, fue ocupada por los atacantes.

El incidente ocurrió el domingo por la noche en las inmediaciones de 164 entre 61 y 62, en Los Hornos, aunque se conoció recientemente. Siete hombres derribaron la puerta, buscaron al padre de familia y comenzaron a golpearlo.

Según trascendió, los atacantes reclamaban una deuda por el terreno en el que la familia había construido su casa.

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Los vecinos mencionan que esta violenta metodología es común: los compradores son inicialmente tentados a adquirir terrenos a precios accesibles y pueden instalarse tras el pago de la primera cuota. Sin embargo, la transacción se realiza sin documentos, y luego, aprovechándose de la vulnerabilidad de las familias, los vendedores elevan las cuotas hasta que se vuelven impagables.

Cuando los compradores dejan de pagar, los vendedores comienzan a reclamar las deudas violentamente, primero con amenazas y luego con agresiones físicas, culminando en desalojos forzosos. Los vendedores se reapropian del terreno, ahora con una casa equipada, incluyendo muebles y electrodomésticos.

Este fue el caso de la familia de Los Hornos atacada el pasado domingo cerca de las 23 horas. La esposa y la hija de 7 años presenciaron cómo golpeaban e insultaban al hombre de la casa, apuntándole con tres armas. El momento más desesperante ocurrió cuando los agresores soltaron un pitbull que mordió a la víctima en brazos y piernas, causándole graves heridas.

El hombre debió concurrir a la guardia para atender sus heridas. Mientras tanto, los siete agresores saquearon la casa, llevándose camas, una garrafa y la instalación eléctrica.

Dos días después del ataque, el hombre regresó a su casa y descubrió que, además de ser saqueada, los delincuentes habían puesto un candado en la puerta.