"Desaparecer por 48 horas": dos nenes se escaparon del colegio para cumplir un reto de Tiktok

Dos chicos de 9 años, estudiantes del colegio Divino Rostro de la ciudad de Mar del Plata, se escaparon de la escuela para cumplir con un peligroso reto de TikTok que consiste en "desaparecer por 48 horas". Los nenes, después de una intensa búsqueda a través de las cámaras de seguridad del municipio, fueron encontrados a unas 30 cuadras de la institución educativa.

El hecho ocurrió ayer en horas de la tarde después de que el colegio denunciara ante la Policía que los estudiantes habían desaparecido de un momento a otro.

Los chicos, alumnos de cuarto grado, habían asistido al colegio y por la tarde las autoridades del colegio aseguraron que fueron al baño durante un recreo y aparentemente desaparecieron alrededor de las 16:40. Ambos habían dejado sus mochilas en la escuela.

De inmediato se activó el protocolo de rastreo del Centro de Operaciones y Monitoreo (COM) y se empezó a hacer un seguimiento del recorrido de los nenes. A través de las cámaras dispuestas en el colegio y en puntos estratégicos de la ciudad, la Policía visualizó que los menores saltaron el paredón del establecimiento y se retiraron por sus propios medios por la calle Sarmiento hacia el paso Aldrey.

Los oficiales siguieron sus pasos por la calle General Paz hacia la avenida Juan B. Justo, hasta que un móvil los halló y los llevó nuevamente al colegio. Según trascendió, los alumnos fueron encontrados hacia las 19 horas sobre la avenida, en las inmediaciones del Club Náutico. Por lo que llegaron a caminar unos tres kilómetros desde el establecimiento.

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De acuerdo a la información difundida, los chicos se fugaron del colegio con el objetivo de cumplir con el reto denominado "Desaparecer por 48 horas" o "48 hour challenge", un peligroso desafío muy popular en la red social TikTok.

En este "challenge", los chicos son "nominados" a través de la red social y, si aceptan el desafío, deben simular una desaparición forzada durante dos días. Es decir, se ausentan de sus hogares, evitan ser vistos por cualquier persona, dejan de usar las redes sociales y, en algunas ocasiones, hasta apagan sus teléfonos.