30/12/2025
El municipio logró completar los pagos de diciembre recién sobre el cierre del año y dependiendo del auxilio provincial. El intendente volvió a mostrar un esquema financiero ajustado, sin margen y con responsabilidades diluidas.
Chivilcoy cerró el año con lo justo. Literalmente. El municipio consiguió pagar los sueldos de diciembre y completar el aguinaldo apenas a tiempo, luego de semanas de incertidumbre y con transferencias externas como salvavidas. Lejos de ser una buena noticia, el episodio volvió a dejar en evidencia una administración sin previsión y con serias dificultades para sostener sus obligaciones básicas.
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PAGOS AL LÍMITE Y SIN PLAN
La frase "contando las monedas" no fue una exageración: describió con crudeza el estado de las arcas municipales. Desde el propio Ejecutivo reconocieron que el pago de salarios y aguinaldos se concretó recién en el filo del calendario, una situación que se repite y que ya no puede explicarse solo por el contexto económico general.
El distrito que conduce el intendente Guillermo Britos comunicó la acreditación de los sueldos de diciembre durante un brindis de fin de año, en un intento de mostrar normalidad donde hubo tensión e improvisación. Los salarios quedaron disponibles recién el 31, y el aguinaldo dependió directamente de una transferencia externa que podía no llegar a tiempo.

El municipio de Chivilcoy confirmó la acreditación de los sueldos de diciembre durante un brindis de fin de año.
DEPENDENCIA DE LA PROVINCIA
La segunda parte del aguinaldo quedó supeditada a una transferencia comprometida por la Provincia. Es decir: sin recursos propios suficientes, el municipio volvió a quedar atado a fondos ajenos para cumplir con obligaciones elementales como el pago a sus trabajadores.
Desde la gestión local admitieron que, tras "largas negociaciones", recibieron acompañamiento provincial. Más allá del eufemismo, el dato central es otro: Chivilcoy no logró cerrar el año con autonomía financiera, una señal preocupante para un distrito que no se encuentra formalmente en emergencia.
UNA CRISIS QUE NO ES NUEVA
Las dificultades financieras no surgieron de un día para otro. La caída de la coparticipación y la baja cobrabilidad de tasas municipales vienen afectando a numerosos distritos bonaerenses durante todo 2025. Sin embargo, eso no exonera a las gestiones locales de su responsabilidad en la planificación y administración del gasto.
Varios municipios llegaron a diciembre con números ajustados, pero en muchos casos el problema se agravó por la falta de previsión y la dependencia estructural de fondos extraordinarios. En ese marco, intendentes radicales negociaron con el ministro de Economía bonaerense, Pablo López, para regularizar deudas vinculadas a IOMA, IPS y otros compromisos.
¡Atención!??@BritosGuillermo
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SEÑALES DE ALERTA
Que un municipio tenga que "contar las monedas" para pagar sueldos no es un mérito ni una anécdota pintoresca: es una señal de alerta. Chivilcoy cerró el año sin margen, dependiendo de auxilios externos y con los trabajadores pendientes de transferencias de último momento.
Más allá de los discursos y agradecimientos, el episodio deja una pregunta incómoda pero inevitable: ¿qué tan sostenible es una gestión que llega sistemáticamente al límite para cumplir con lo básico? La respuesta, por ahora, no tranquiliza.
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