Verano 2026: los alquileres turísticos ya alcanzan el 80% de ocupación

Aun cuando falta más de un mes para el comienzo oficial del verano, el movimiento turístico ya empieza a marcar tendencia. En distintos puntos del país, los alquileres temporarios registran niveles de ocupación que oscilan entre el 60% y el 80%, especialmente para enero, superando las proyecciones iniciales del sector.

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El dato cobra relevancia en un contexto donde el aumento de los viajes al exterior había generado cautela entre operadores y prestadores. Sin embargo, las cifras actuales no solo mejoran las expectativas, sino que también se ubican por encima de las consultas registradas a esta altura del año pasado.

EL ALQUILER TURÍSTICO, LA OPCIÓN QUE SE IMPONE

El verano 2026 consolida una tendencia que ya venía creciendo: el alquiler turístico se posiciona como la modalidad de alojamiento más elegida por los viajeros. Casas y departamentos le sacan ventaja a otras opciones, impulsados por la búsqueda de mayor privacidad y comodidad.

La preferencia se concentra, sobre todo, en unidades independientes que ofrecen amenities y mayor flexibilidad durante la estadía. Este comportamiento refleja un cambio en los hábitos de consumo, con un turista que prioriza el confort y la autonomía a la hora de vacacionar.

ESTADÍAS MÁS LARGAS Y RESERVAS CON ANTELACIÓN

Otro rasgo distintivo de la próxima temporada es la planificación anticipada. A diferencia de otros años, los turistas ya no esperan a último momento para definir sus vacaciones, lo que se traduce en altos niveles de ocupación temprana.

Para este verano, las familias argentinas organizaron sus vacaciones con meses de antelación.

Además, crece la duración media de las estadías, que en muchos casos superan la semana. Este cambio deja atrás el predominio de escapadas cortas y aporta mayor previsibilidad a propietarios y prestadores del sector turístico.

DESTINOS DIVERSOS Y EXPECTATIVAS POSITIVAS

El buen nivel de reservas no se limita a una sola región. La Costa Atlántica, con Mar del Plata a la cabeza, lidera las preferencias, pero el fenómeno también se replica en destinos de sierras, el Norte argentino y la Patagonia.

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Este escenario anticipa un movimiento turístico amplio y sostenido, con impacto directo en las economías regionales y en toda la cadena de servicios vinculada a la actividad. Con estos indicadores, el verano 2026 se perfila como una temporada de alta ocupación, marcada por un turista más previsor y una clara inclinación por el alquiler temporario.