Escándalo en Villa Gesell: guardavidas tomaron el Municipio y denunciaron graves irregularidades contra Gustavo Barrera

La crisis política y social en Villa Gesell sumó este lunes un episodio de máxima tensión. Decenas de guardavidas ingresaron al Palacio Municipal para visibilizar una serie de denuncias contra el Ejecutivo local, que incluyen salarios recortados, violaciones a la normativa vigente y serias deficiencias en los protocolos de seguridad en las playas del distrito.

LEER MÁS: Lo ejecutaron de un disparo en la cabeza en González Catán y sospechan un ajuste de cuentas

La protesta, encabezada por la Unión de Guardavidas de Villa Gesell, volvió a colocar bajo la lupa a la administración del intendente Gustavo Barrera, cada vez más cuestionada por distintos sectores. El conflicto se da, además, en un contexto marcado por derrotas políticas, polémicas presupuestarias y un creciente malestar social.

RECLAMOS LABORALES Y PLAYAS SIN COBERTURA

Los guardavidas denunciaron una serie de irregularidades que, según sostienen, afectan tanto a los trabajadores como a los bañistas. Entre los principales puntos señalaron la falta de reemplazos ante jubilaciones, fallecimientos y licencias, lo que redujo de manera significativa la cantidad de personal disponible en las playas.

También cuestionaron la implementación de un horario cortado que fue declarado ilegal por la Justicia y la reducción de la cobertura diaria, que pasó de las 12 horas establecidas por ley a un esquema limitado de 10 a 19. A esto se suma la ausencia de controles en las Unidades Fiscales Turísticas, un aspecto clave en plena temporada.

Gustavo Barrera, cada vez más acorralado.

Otro eje central del reclamo es el recorte salarial del 40%, que atribuyen a una decisión unilateral del Municipio al desconocer la última paritaria, donde las horas extras habían sido incorporadas al salario básico. Desde el sector advierten que esta medida precariza aún más las condiciones laborales.

SEGURIDAD ACUÁTICA BAJO ALERTA

Uno de los puntos más sensibles del conflicto es la situación del Programa de Gestión Integral de Seguridad Acuática (PGISA). Según denunciaron, desde noviembre de 2024 el plan se encuentra desaprobado por la Comisión Provincial de Guardavidas, lo que implica falencias estructurales en el sistema de prevención.

Las observaciones incluyen insuficiencia de personal, falta de elementos de seguridad, carencias en embarcaciones y una extensión de costa a cubrir que no se ajusta a los parámetros exigidos. Para el gremio, estas deficiencias incrementan de manera directa el riesgo de accidentes.

? Escándalo en Villa Gesell: guardavidas tomaron el Municipio y denunciaron graves irregularidades contra Gustavo Barrera

? Reclamos por recortes salariales, incumplimientos legales y fallas en la seguridad de las playas derivaron en una fuerte protesta en el Palacio... pic.twitter.com/PXLu5xpojc

- El Bonaerense (@elbonanews) December 15, 2025

Desde la Unión de Guardavidas advirtieron que la desaprobación del PGISA no es un dato menor y que la responsabilidad recae de lleno en la gestión Barrera, que no habría realizado las correcciones necesarias para garantizar un servicio adecuado.

DENUNCIA FORMAL Y ADVERTENCIA AL MUNICIPIO

El conflicto se formalizó con la presentación de una denuncia ante el Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires, fechada el 25 de noviembre de 2025 y firmada por el secretario general Juan Manuel Giménez y Lautaro Suárez Serrano.

En el escrito, Giménez solicitó que se realicen inspecciones tanto en el ámbito público como privado "por el incumplimiento de la normativa vigente". Además, remarcó que el Plan Integral de Seguridad Acuática "no se encuentra aprobado por el Municipio de Villa Gesell", lo que genera "un riesgo enorme para trabajadores y bañistas".

La denuncia también sostiene que ni el Municipio ni las Unidades Fiscales Turísticas cumplen con el período mínimo de 150 días corridos de servicio de guardavidas, tal como establecen la Ley Nacional 27.155 y la Ley Provincial 14.798. En ese marco, el gremio responsabilizó a las autoridades provinciales y municipales por cualquier accidente o situación de riesgo que pudiera producirse.

Pedido de inspección presentado ante el Ministerio de Trabajo bonaerense.

BARRERA, BAJO FUEGO CRUZADO

El reclamo de los guardavidas se suma a una seguidilla de cuestionamientos políticos que golpean a la gestión de Gustavo Barrera. La protesta se da en un clima de creciente malestar, atravesado por el intento oficial de aplicar un aumento del 90% en las tasas municipales y por acusaciones vinculadas a una presunta "estafa millonaria" en el presupuesto del hospital local.

Desde la oposición, las críticas se endurecieron. El concejal de La Libertad Avanza, Adrián Green, aseguró que "la ciudad está en pleno abandono" y apuntó contra el funcionamiento del sistema de salud y el aumento de la inseguridad. En la misma línea, Emiliano Peluffo afirmó que Barrera "no es un intendente presente" y que el distrito atraviesa "un abandono total".

LEER MÁS: El Congreso activa el debate del Presupuesto 2026 y el Gobierno acelera para aprobarlo antes de fin de año

Más contundente fue Luis Vivas, quien calificó la gestión como "nefasta" y denunció la existencia de irregularidades constantes. En ese escenario, la toma del Palacio Municipal dejó al descubierto algo más que un conflicto sectorial: expuso a un intendente cada vez más acorralado por denuncias, protestas y un desgaste político que no deja de profundizarse.