"Disfrutaron matándolo": la viuda de Jeremías Sosa exige justicia por el linchamiento en Olivera

BONA DATA

• Jeremías Sosa, albañil de 30 años, viajó a Buenos Aires para trabajar en una obra y ahorrar para su hija.
• Sufrió un ataque de pánico en la calle y fue confundido con un delincuente por un grupo de vecinos en Olivera.
• Lo persiguieron, ataron a un poste y golpearon hasta dejarlo inconsciente; murió poco después en el hospital.
• Tres personas fueron detenidas, pero la familia denuncia que al menos diez participaron del asesinato.
• Su esposa exige justicia y asegura que muchos de los implicados siguen libres porque tienen poder e influencias.

Una cacería mortal en Olivera

Jeremías Sosa dejó su hogar en Jardín de América, Misiones, para viajar a Buenos Aires y trabajar en una obra. Con lo que ganara en esos dos meses, pensaba pagar la fiesta de 15 de su hija Sabrina.

El 22 de febrero, mientras visitaba a su hermana en Olivera, sufrió un ataque de pánico. Buscando calmarse, salió a tomar aire. Un ruido fuerte lo asustó y comenzó a correr. En ese estado de confusión, vecinos lo vieron y, sin saber quién era, lo señalaron como sospechoso.

Sin mediar preguntas, lo persiguieron y lo atraparon. "Tenemos identificados a todos los que mataron a Jeremías. Son al menos 10, pero lamentablemente están libres porque tienen poder y plata. En los videos que tiene la fiscalía se los identificó, pero aún así no los agarran", denunció Carolina Sotelo, su esposa.

La viuda del joven misionero asesinado a golpes por vecinos de un pueblo de Buenos Aires que creyeron que era un ladrón: "Disfrutaron matándolo"

Jeremías Sosa tenía 30 años y era albañil. Estaba ahorrando para festejarle el cumpleaños de 15 a su hija y solía recibir en su casa a... pic.twitter.com/BP53Twebaq

— Jorge Kurrle (@jorgekurrle) March 9, 2025

Golpeado hasta la muerte mientras pedía ayuda

Los atacantes ataron a Jeremías a un poste y comenzaron a golpearlo con furia. En las imágenes que están en manos de la fiscalía se ve cómo intentaba explicarles que no era un ladrón. "Él intenta explicarles que no es un ladrón. Y pide que llamen a su hermana. Pero no lo escuchan y le siguen pegando", relató Carolina.

Las patadas y puñetazos no cesaron. Jeremías, en el suelo, rogaba que lo dejaran ir con su familia. "Mi esposo rogó piedad. Gritaba que por favor lo llevaran a la casa de su hermana, pero nadie lo escuchó y nadie hizo nada para frenar el ataque. Fue como si disfrutaran matándolo", expresó su esposa con dolor.

Cuando la policía llegó, el joven ya estaba inconsciente. Fue trasladado al Hospital Zonal General Nuestra Señora de Luján, donde confirmaron su fallecimiento. La autopsia indicó que murió por un "shock neurogénico con traumatismo grave de cráneo".

"Tragedia"

Porque Jeremías Sosa fue golpeado, atado y maniatado por más de 10 personas que creyeron que era un delincuente pic.twitter.com/eJz3eYZhOK

— Tendencias en Argentina (@porqueTTarg) March 4, 2025

Tres detenidos y una investigación abierta

Hasta el momento, fueron arrestados Gustavo Rocha (49), Alex Iñiguez (25) y Lucas González Bonomo (23). Sin embargo, la fiscalía solicitó la captura de otro sospechoso, y la familia de la víctima insiste en que hay más implicados.

"Quiero que se muevan y atrapen a todos los responsables. Hasta hoy no puedo creer lo que pasó. Me despierto y creo que él todavía está trabajando en Buenos Aires. Mi cabeza sigue pensando eso: que él va a volver", lamentó Carolina.

Último adiós en Misiones a Jeremías Sosa. https://t.co/GbJzlwECOm pic.twitter.com/c3pcDlUsXq

— El Civismo (@elcivismo) February 28, 2025

Un trabajador solidario que ayudaba a niños vulnerables

Además de ser un padre dedicado, Jeremías tenía un fuerte compromiso con su comunidad. En su casa de Misiones recibía a jóvenes con problemas de consumo y en situación de vulnerabilidad.

"Son alrededor de 20 y tienen entre 11 y 16 años. Incluso algunos están ahora acá conmigo", contó Carolina. "Nosotros preferimos evitar que se lo mencione como comedor comunitario, porque en realidad no estamos registrados ni recibimos ayuda. Lo hacíamos porque queríamos, de corazón. Y yo voy a seguir adelante por la memoria de Jeremías".

Su mayor sueño era ver a su hija cumplir 15 años y darle una celebración especial. Ahora, su familia solo busca justicia para que el crimen no quede impune.

La familia de Jeremías Sosa, el joven misionero de 31 años que murió tras ser brutalmente golpeado por un grupo de vecinos en la localidad bonaerense de Olivera, continúa reclamando justicia a dos semanas del trágico episodio. Mientras la causa avanza con tres detenidos, sus... pic.twitter.com/vXNF4FfDLr

— misionesonline.net (@misionesonline) March 6, 2025