21/08/2024
En Longchamps, un vecino dedica sus días a construir algo que, para muchos niños, representa una fantasía hecha realidad: autos a pedal. Emiliano, el artífice detrás de estas obras de ingeniería artesanal, habló con El Bonaerense y contó cómo comenzó su proyecto con un objetivo sencillo, pero lleno de amor.
por
Julieta Aurilio
En Longchamps, un hombre dedica sus días a construir algo que, para muchos niños, representa una fantasía hecha realidad: autos a pedal. Emiliano, el artífice detrás de estas obras de ingeniería artesanal, habló con El Bonaerense y contó cómo comenzó su proyecto con un objetivo sencillo, pero lleno de amor.
"Todo surgió para hacerle un auto a mi hijo Valentín", cuenta Emiliano. "En el medio pensé: 'debe haber muchos Valentín a los que les gustan los autos', así que después de hacer el de Valen comencé a comercializarlos", recuerda.
Ser técnico mecánico de formación ha sido una ventaja para Emiliano, quien desde adolescente ha estado inmerso en el mundo de la mecánica automotriz, primero por hobbie y luego de manera profesional en el ámbito industrial. "Mi amor por los autos surgió desde pequeño, me gustaban las carreras y los autos, como ahora", comenta a este medio.