Ante las necesidades básicas de los vecinos del oeste, un matrimonio se organizó y creó un sitio para acompañar y ayudar a quienes lo necesitan. El Bonaerense dialogó con el fundador del comedor quien nos comentó sus inicios, experiencias y proyectos. 

La asociación civil "Fé como un Granito de Mostaza" es un merendero comunitario que además funciona como una escuela bíblica para los más chicos. “Es un sueño que traemos en el corazón con mi esposa desde hace mucho tiempo”, comenzó a contar Hector Heber Ramirez”.

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Y continuó: “Ayudar al más pequeño, desde lo más básico, con una copa de leche y algún alimento que llene el estómago de cada niño que viene a este merendero. También, ofrecer ropa al que le falta”.

Con el objetivo de cambiar la sociedad “que cada día está más corrompida por la maldad.  Creemos que desde la familia como primera institución y nuestro Señor Jesús, los hogares pueden ser transformados”, reza la presentación del grupo en sus redes sociales. 

En diálogo con este medio, Hector Ramirez, presidente de la Asociación Civil Fé como un Granito de Mostaza, comentó que trabaja en conjunto con su esposa y amigos desde el año 2015 en el barrio Casasco, perteneciente al partido de Moreno.

“En el 2014 compramos la casa y al año vimos la necesidad que atraviesan los niños del barrio. Necesidad de comer, bañarse,vestimenta, poder ir a la escuela (sin útiles escolares no se puede estudiar), etc. Entonces, decidimos con mi esposa, Andrea Alarcon, abrir un merendero”, contó el fundador del comedor al que asisten entre 100 y 200 chicos. 

Allí, los menores asisten para tomar la merienda, (chocolatada, arroz con leche…) leer, (el sitio cuenta con su propia biblioteca), cantar, bailar y hasta para aprender a tocar instrumentos como la guitarra, bajo y batería. “Articulamos con la salita del barrio para realizar jornadas de vacunas, control de planillas, jornadas oftalmológicas, etc”, informaron desde el equipo solidario. 

Granito de Mostaza lo lleva adelante personas con empatía y ganas de apoyar y brindar además de amor, enseñanza. Son vecinos que quieren sacar adelante a pequeños chicos y que puedan contemplar de un mejor futuro. “Buscamos realizar un acompañamiento en los niños que asisten, como buscar la manera de que puedan seguir estudiando y por eso nos movemos para conseguir útiles escolares, guardapolvos, mochilas, zapatillas”, detalló Heber. 

Además de alimentarse y aprender, los chicos pasan ratos súper divertidos. “Una vez por mes celebramos los cumpleaños de los niños que cumplen en esas fechas, realizamos actividades infantiles como cine en la plaza o en los patios que nos prestan para pasar películas infantiles”.

Al respecto, este sábado 27 de agosto, en la plaza del barrio, el grupo conmemorará el día del  niño, y para ello, todo aquel que desee colaborar, será bienvenido. “Estamos necesitando harina, caramelos, chupetines, turrones, alfajores, globos, vasos y cucharitas descartables. Nos falta para poder completar las bolsitas que le daremos a cada niño”, expresaron y confesaron que esperan un promedio de 250 nenes.

¿Experiencias? ¡Miles!

“Una de las tantas anécdotas fue una niña que me trajo el boletín mostrándonos que terminó la primaria gracias a los libros que se llevaba de nuestra ONG”, nos comentó Hector. 

Y agregó que las experiencias son gratificantes, “cuando me toca caminar por el barrio y los niños (hoy preadolescentes y adolescentes) se acercan, abrazan, te saludan desde cualquier lado a los gritos, pasas por las escuelas y escuchas el "Heber!!!" , o el "Pastor!!" Porque también soy pastor de una iglesia”. 

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Definitivamente Granito de Mostaza ayuda a muchas familias y ellas se lo devuelven con actos de reconocimiento y afecto. Quien desee colaborar, la organización se encuentra sobre  Padre Fahy casa 451, esquina San Juan, partido de Moreno. Además, se encuentran los martes y miércoles en barrio Parque del Oeste entregando mercadería a personas de bajos recursos.

En conversación, el fundador contó que tienen la idea de abrir otro merendero es decir que la ayuda de los vecinos es fundamental para que estas buenas acciones se sigan reproduciendo. La mercadería más consumida y a su vez, la más necesaria es leche en polvo, flan, gelatina, chocolate, azúcar, aceite, arroz, fideos, tomates, condimentos, carne, verduras y "todo lo que sientan en el corazón", pidió el vecino solidario.

“El trabajo que realizamos es completamente a pulmón. Notamos que cada día más vecinos se van sumando para retirar la comida. Eso nos muestra que la situación económica se complica cada día más y es necesario desde nuestro lado aportar la ayuda para que puedan llevar el plato de comida a la casa”. Para colaborar en la causa, pueden contactarse con Heber a través de su Facebook, o bien vía Whatsapp al número 11 409 062 14. Todos podemos ayudar.