Ocurrió en el sanatorio municipal “San Cayetano”. En diálogo con El Bonaerense, sus hijos denunciaron que “le dieron cuatro diagnósticos distintos y lo mataron”.

Otro terrible caso de mala atención en el Hospital Municipal San Cayetano fue denunciado por un vecino de San Fernando. “En el hospital de la 20 no lleven a sus familiares. Ahí mataron a mi papá”, dijo Esteban Álvarez. Y le contó todos los detalles a El Bonaerense.

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Esteban, junto a sus hermanos, aseguran que en ese sanatorio atendieron muy mal a su papá Ángel Álvarez y que, por no haber dado el diagnóstico correcto, terminó muriendo en menos de dos semanas. “Entró por un dolor de brazo, le dieron cuatro diagnósticos distintos y murió”, expresó con profunda tristeza.

Esteban llevó a su papá al hospital se había caído y tenía dolor de brazo, sin embargo, todo fue de mal en peor. “Primero notamos que le costaba respirar un poco, pero estaba lo más bien realmente. Lo tenían con oxígeno y le dijeron que tenía fibrosis en el pulmón, ése fue el primer diagnóstico”, sostuvo.

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De repente, todo cambió para el hombre de 73 años. “El día del amigo fuimos a verlo y estaba, repito, lo más bien. Pero horas después nos llamaron para decirnos que estaba en coma e intubado, nos dijeron que si pasaba esa noche lo podríamos ver al otro día”, contó con indignación.

Además, agregó: “Todos nosotros deducimos que a mi papá lo intubaron sin necesidad. Él estaba bien y podría haberse mejorado antes si hubiese sido bien tratado”.

“Nos dieron cuatro diagnósticos distintos: fibrosis en el pulmón, covid, neumonía y, finalmente, EPOC”, reveló. Este último habría sido el correcto, pero ya era demasiado tarde.

Sobre el segundo diagnóstico errado, comentó: “Hicimos un reclamo cuando nos dijeron por mensaje de texto que tenía covid. Porque el resultado del hisopado lo vieron adelante mío y era negativo”.

Ante todas estas supuestas confusiones y, al ver que su papá empeoraba, decidieron trasladarlo aunque estuviera en coma. “Lo sacaron a las 19 casi desnudo del hospital, pese al frío, una locura. Lo llevamos al Sagrado Corazón de Don Torcuato pero no lo pudieron estabilizar y falleció”, relató Esteban.

“En esa clínica nos dijeron que lo habían lastimado cuando lo intubaron. En el lapso de una semana, me sacaron a mi papá. Lo llevé porque le dolía el brazo y hoy ya no tengo a mi viejo”, agregó, al borde de las lágrimas.

“Para mí no sabían lo que tenían, parecían aprendices. Si hubiera habido al menos un médico que entendiera, hoy a mi viejo lo tendría con vida”, sostuvo. Y finalizó: “Queremos que se haga justicia y que no le pase a nadie más”.

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Lejos de ser un caso aislado

En los últimos días Gastón Nicolás Aragón, adolescente con retraso madurativo, murió de apendicitis. En ese sanatorio lo habían mandado de nuevo a la casa, asegurando que “no tenía nada”.

“No fuimos la única familia que destruyó ese hospital. Hace muy poco falleció un pibe de 18 años, nadie sabe decirte nada ahí. La verdad el hospital es una maravilla, pero tienen que cambiar los médicos, son un desastre y el municipio no invierte”, aseveró Esteban.