Si bien brindó pocas palabras por el apuro de la increíble situación vivida, dijo con emoción: “De corazón, gracias a todos”.

Se la buscó a más no poder, se observaron cámaras, se rastrillaron zonas y hasta se ofreció recompensa de un millón y medio de pesos. Gracias a todos los esfuerzos y a la colaboración vecinal, se pudo seguir los pasos y hallar a Betiana Rossi en Escobar. Y ahora, su hermano Martín rompió el silencio familiar.

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“Estoy temblando, estoy feliz. Yo les voy a informar todo, denme tiempo para encontrarme con ella. Yo sentía que estaba viva”, expresó, antes de entrar a encontrarse con su hermana. Y agregó: “Siempre tuvimos esperanza. Yo creo en Dios, me lo decía el corazón y no me equivoqué”.

Cabe destacar que durante la semana se lo había visto muy triste en su diálogo con los medios y había asegurado que algo la había “sobrepasado” a su hermana. Ella, madre de tres hijos, está siendo atendida por especialistas en salud mental.

Por último, Martín terminó dando un mensaje de agradecimiento hacia todos los que colaboraron con la búsqueda y el hallazgo de Betiana. “De corazón gracias a todos”, finalizó.